top of page

Los médicos de la peste negra

Un médico de la peste negra era un médico especialista que trataba a aquellos que padecían de la peste. Eran específicamente votados por pueblos que tenían muchas víctimas de la peste en tiempos de epidemia. Debido a que la ciudad era la que pagaba su salario, ellos cuidaban de todos los ciudadanos tanto a ricos como a pobres. Estos médicos no eran profesionales con instrucción tradicional como otros médicos o cirujanos experimentados, y en muchos casos eran doctores de segunda categoría que no habían podido establecerse exitosamente en la profesión o médicos jóvenes que estaban tratando de hacerse camino.

Los doctores de la peste trataban a los pacientes según su acuerdo y eran conocidos como médicos municipales o comunitarios “de la peste negra”, mientras que los “médicos generales” eran doctores separados y podían estar en la misma ciudad o pueblo europeo al mismo tiempo. En Francia y los Países Bajos los médicos de la peste negra muchas veces no tenían ningún entrenamiento formal como médicos y eran conocidos como “empíricos”. En un caso, uno de estos doctores había sido vendedor de frutas antes de dedicarse a la medicina. Su principal tarea, además de cuidar de las víctimas de la peste, era anotar en los registros públicos las muertes debido a la peste.

Cuando las oleadas de peste diezmaban Europa, muchas personas se dedicaban al saqueo de los hogares que quedaban sin mayores a cargo. Los que eran médicos huían antes que los pacientes, pues sabían lo que se venía. Otros se la agarraban con víctimas propiciatorias acusadas de causar la desgracia, que en general eran las minorías de cada país, o las brujas, o los herejes.

Los microbios no se conocían y la superstición se superponía a la investigación, de manera que hasta las academias explicaban la aparición de la peste a cosas tan disparatadas como la conjunción de los astros y la mala reputación de Marte, Júpiter y Saturno.

Aunque no conocían la causa, les quedaba claro el contagio, directo o indirecto. Aunque fueras sacerdote o noble, la podías contraer, no era un padecimiento exclusivo de los pobres… pero si no estabas en contacto con enfermos, era probable que no la padecieras. De manera que los médicos para atender a los enfermos debían vivir aislados del resto de la población y despedirse de sus familiares y amigos.


Komentáře


Entradas destacadas
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
bottom of page