Características de las razas
Finalmente, para terminar con las características de las razas vamos a hablar de las razas que surgieron como razas de compañía principalmente. La mayoría de estas razas son pequeñas y son llamadas coloquialmente como “perros falderos”. No obstante, no es un secreto que los perros pequeños tienden a reaccionar mucho más agresivamente que los adultos, por lo cual, hay que tener especial cuidado con su interacción con los niños, teniendo que socializarlos en su periodo temprano (desde las 3 a las 12 semanas).
Chihuahua: Es la raza más pequeña y, tal vez, de las que más agresividad muestran con extraños o cuando se sienten atacadas. Son animales muy longevos, algo característicos de los animales pequeños. Por su tamaño reducido necesitan más cuidado cuando se trata de los paseos o la socialización con otros animales. Son animales que tienden a necesitar más atención de parte de sus propietarios. Son bastante enérgicos, pero su manejo es más sencillo por no necesitar demasiado espacio.
Pomerania: Un poco más grande que el chihuahua y con muchísimo más pelaje, el Pomerania es una raza bastante común. Estos animales requieren mucho más tiempo en el mantenimiento de su pelaje, entre baños y los cepillados frecuentes. Aprenden fácilmente y son bastante juguetones.
Bulldog francés: Para muchos considerados como perros feos, para otros como adorables. El bulldog francés, al igual que el inglés, son perros braquicéfalos, es decir, que tienen la nariz chata, lo que hace que tengan muchas complicaciones al momento de respirar. Para estos animales es difícil las horas de paseos largas o bajo el sol, y se debe tener especial cuidado cuando se van a realizar intervenciones medica que involucren la anestesia. Son animales bastante tranquilos y juguetones, a pesar de sus problemas respiratorios, y tienen a ser bastante sociables. Limpiar los pliegues que se hacen por el exceso de piel es necesario para evitar que se generen infecciones por hongos. Tienden a ser destructivos cuando se les ignora o no se les da el tiempo necesario.
Cocker spaniel: De tamaño medio, el cocker spaniel es conocido porque no se lleva bien con los niños, algo que no es del todo cierto. La mayoría de los criadores de esta raza, o propietarios en general, son personas adultas que acostumbran al animal a vivir tranquilos y con tratos delicados; esto hace que el trato con los niños sea complicado por su falta de cuidado. Su pelaje requiere bastante tiempo para el mantenimiento adecuado y evitar problemas dérmicos y, en el caso de las orejas, desarrollar otitis.