Diviértete cocinando en familia, te enseñamos
Cocinar es uno de los pasatiempos que ayudan a fortalecer los lazos familiares, además dejar a un lado la rutina para disfrutar de los espacios con las personas que quieres, contribuye a generar nuevas experiencias y charlar que permitirán que conozcas más sobre cada uno de los miembros que tanto amas.
Disfrutar de la gastronomía en familia, también promueve el trabajo en grupo, y en cierta medida despierta la creatividad, así que atrévete a cocinar y haz una receta sencilla y divertida de Cupcakes, los pastelitos que cada vez están más de moda.
Ingredientes para la base:
3 tazas de harina de trigo 2 cucharaditas de polvo para hornear 1/2 cucharadita de sal de mesa 3/4 taza de mantequilla sin sal, una temperatura ambiente 1 1/2 tazas de azúcar estándar 4 huevos grandes 2 cucharaditas de extracto de vainilla 1 1/4 tazas de leche
Ingredientes para la mantequilla:
2 1/2 barras (225 gramos) de mantequilla sin sal, suavizada 1 cucharadita de extracto de vainilla 4 tazas de azúcar glass 2 cucharadas de leche 5 gramos de extracto de vainilla
PREPARACIÓN
Base:
Precalienta el horno a 180 ºC. Engrasa 24 moldes para el mollete o la forra con las capacidades de papel. Mezcla muy bien la harina con el polvo para hornear y la sal en un tazón mediano.
En un tazón aparte, bate la mantequilla con el azúcar hasta que se esponje. Sin dejar de batir, agrega uno por uno de los huevos, mezclando bien después de cada adición. Incorpora la vainilla. Añadir los polvos a la mezcla anterior, alternando con la leche, y mezclar hasta deshacer todos los grumos, pero sin batir de más.
Vierte la masa dentro de los moldes preparados, llenándolos hasta tres cuartas partes de su capacidad. Hornea hasta que se sientan esponjosos al tacto, aproximadamente 20 minutos. Retira del horno y deja enfriar dentro de los moldes durante 10 minutos. Luego desmolda y coloca sobre las rejas de alambre para que enfrente completamente.
Crema de mantequilla:
Bate en un tazón la mantequilla y la vainilla, hasta acremar. Agrega el vaso de azúcar, 1 taza a la vez, batiendo muy bien después de cada adición. Añade la leche y sigue batiendo hasta que el betún se esponje. Decora los cupcakes fríos con este betún.
